Dos semanas dos
12/06
"Cuando la montaña llama"
El plan original de domingo era tomar una clase de acroyoga para empezar a sociabilizar con "gente del palo". Qué palo no sé, pero además de realizar una actividad que me gusta me pareció copada la idea de comenzar a hacer sociales por fuera del hostel.
Los planes son buenos como guía, pero puede surgir que algo sea más tentador y eso ocurrió. En el hostel me hice amiga de tres chicas que no eran la superpoderosas pero trajeron azúcar, flores y muchos colores a mi estadía aportando mates y las típicas "charlas de chicas" que a mi soledad le estaban faltando. Así que aproveché mi día franco y la buena compañía para ir hasta el Refugio Frey. Nos tomamos el colectivo 55 en Bustillo que nos llevó a la base del cerro y de ahí caminamos.
Siempre me entusiasmó todo lo relacionado a la vida en la naturaleza, el senderismo y la supervivencia. Quizás esto suena exagerado para quienes practican deportes de montaña habitualmente, pero para mí, que el deporte más extremo que practiqué fue tomarme el Sarmiento en hora pico, es un mundo nuevo. El refugio está en la parte sur del Cerro Catedral y en la puerta te recibe un cartel que dice "1700 m de altura". Al lado está la Laguna Toncek (Eso me lo enseñó internet) donde ahora, que se encuentra congelada podés patinar. El sendero es de aproximadamente 10 km, y tiene una dificultad media, si bien nuestras vidas no corrieron peligro en ningún momento, no sé si es recomendable para alguien que nunca hizo nada de deporte en su vida o que se agite rápido. Son cuatro o cinco horas de caminata, que valen la pena. Es hermoso como el paisaje se va transformando desde un sendero barroso hasta mini cascadas congeladas, piedras que hay que saltar y arboles medio caidos que esquivar. Va desde una tierra semidesnuda a un bosque salido de un cuento. Hasta ahora fue la mejor experiencia que viví. Spuperó mi caminata por los Glaciares allá por el 2008. Llegamos exhaustas, muertas de frío pero felices. Adentro nos esperaba un cartel del Club Andino de Bariloche que nos bienvenía con un "Cuando la montaña nos llama, moviliza nuestro cuerpo y nuestro espíritu. Responder a su llamado es estar dispuesto a percibir la armonía de todos los elementos de la creación en forma humilde, sencilla, divina". Suena como algo trillado esto de "el llamado de la montaña" pero les aseguro que es real y ahí arriba es el único llamado que podés recibir porque afortunadamente no hay señal. Cuando la naturaleza ruge, no es posible ignorarla por mucho tiempo.
Nos quedamos a pasar la noche, ahí con 14 bajo cero abrigándonos. Al subir a las habitaciones nos recibió Emilio, un gato negro que emergió de la oscuridad dandonos un susto digno de un cuento de Edgar Allan Poe. Mucho no nos duró igualmente porque a la media hora, caimos las cuatro rendidas.
13/06
Todo lo que sube, baja.
Otro lunes que me despierto feliz. Otro lunes que no es tan lunes. La rutina mata más que la adrenalina de despertar en la montaña por primera vez en la vida. Me desperté confundida, sin saber si era real pero sí, estaba ahí, viendo una fina nevada que me dió los buenos días. Cuando el equipo completo estuvo listo, nos fuimos abajo a hacernos unos mates para calentarnos. Si bien en el refugio te prestan bolsas de dormir, les recomiendo que lleven la propia porque hace mucho frío.
Después de sacarle fotos a todo y grabar videitos divertidos. Las chicas decidieron patinar sobre la laguna y yo oficié de camarografa oficial. Jugamos un rato con la nieve, nos tomamos unos mates más para devolverle al cuerpo los 37 grados que necesitaba para arrancar y emprendimos el descenso. Ahora con más pilas y ayudadas por la gravedad (Gracias Newton por descubrirla), bajamos a los saltos la mitad del camino. Nos divertimos mucho bajando y hablando de lo linda que fue esta experiencia la cual vale la pena repetir. Fotos acá
14/06
Qué mal la estoy pasando!
Hoy mi día fue tranquilo. Después de trabajar me dediqué a disfrutar del sol y dibujar. Jugué con colores y formas, buscando adentro mío para ver qué salía. Tomé unos matecitos con Mati y Euge, mis papás adoptivos de ElWray que de paso les cuento que tienen nueva página, con quienes nos acompañamos en este nuevo comienzo. Después me fui caminando hasta el centro a dar unas vueltas, y termine en mi amada Berlina, tomandome una cervecita acompañada de Cortázar, que me invitó a traerme "Todos los fuegos son el fuego".
Si, una sola porque en casa, me esperaban dos terribles platos de fideos amasados. Tuve que sacrificar mi esbelta figura y clavarme dos platos sin respirar. Con coca Light.
15/06
Lejos está lo que estoy buscando
Me desperté temprano, y googlée planes por Esquel, San Martín de los Andes y varios más. Dedique la mañana a unos buenos mates y pura logística para mi vida, y la parte de ella que dedico en mi blog. Me llena el alma saber que lo que escribo acá lo está leyendo alguien, que ya no se siente tan solo como yo lo estaba. O al menos eso creía hasta empezar a ver blogs como los que escriben Acróbatas del Camino, Aniko Villalba o leer libros que no te abren la cabeza si no que te la explotan con la idea de que eso que soñas, esa vida que querés, es posible y más fácil de lo que crees. Recibí mensajes cargados de ganas de empreder sus propios caminos y les digo una sola cosa: Haganlo! Qué están esperando? Vivan su vida como quieran que es toda suya. Yo no soy ninguna heroína, ni valiente. Tengo en claro que no inventé nada, no soy la primera y espero no ser la última. Mientras tanto, me hace bien saber que están ahí leyendome y mimándome a la distancia.
16/06
Por las noches la soledad desespera (y por las mañanas también)
Todos los que se fueron lejos, o no tanto como yo, te describen las etapas de la distancia. Los primeroz diez días, es la emosión de la libertad, de hacer lo que querés cuando querés, de salir sin abrigo y que nadie te pida que te lo lleves, de no avisarle a nadie a que hora volvés o a dónde te vas. De que no importe a que hora te levantas o cuando te acostás. De no explicar. Allá en Buenos Aires, dejé a los clientes que me quemaban el cerebro, por buscar la paz. El cemento que calienta en verano, por el sol que te mima allá en el fondo del lago. El subte plagado de gente por una montaña solitaria.
A mil trescientos kilómetros en línea recta de todo lo que me atortmentaba. Pero también, a medida que pasan los días me doy cuenta que son mil trescientos kilómetros de unas tortas fritas con mis abuelos, del arroz con leche de mi abuela, de un maullido de mi gata, de los jueves de taller con los pibes, de unos mates en el espacio verde con Coky, de hacer cosas de Mabel con las Mabeles. Pasada la emosión del "me voy vivir sola" está la distancia real entre lo que querés y los que querés. Que si pasa algo bueno no estoy ahí para festejarlo, y si pasa algo malo no lo voy a llorar con ellos. Pero a la vez hay algo mas fuerte que yo que me pide que me quede, y que no me impide seguir siendo feliz cuando miro al lago diciéndome a mí misma "tanto tiempo lo soñaste y ahora es real". Nobody said it was easy me canta Chris Martin, porque separarme de Buenos Aires no iba a ser fácil. Pero día a día refuerzo mi idea de que este es el camino que elijo y no lo cambio por nada.
17/06
Café la humedad.
Café sin humedad, sola en compañia de un frío que te taladra los huesos, porque em invierno se empezó a a asomar y se hace sentir. "Tendrás un largo y frío invierno si tienes un corto y frío corazón" le dijo Merlín al Caballero de la armadura oxidada lo cual está implícito entre los habitantes de Bariloche, los desterrados, los que huyeron de la ciudad para buscar algo mejor, así es como todos son súmamente hospitalarios con los nuevos habitantes, con el amigo del amigo que en dos semanas se transforma en tu hermano del alma. Porque acá nos unen las soledades y esa necesidad de los amigos de toda la vida que no están físicamente acá. Y así es como estando sola, no me siento sola nunca.
18/06
Sábado a la noche, otra vez
Quizás esta publicación la demoré un poco más, porque hubo muchos sentimientos mezclados en ella. Y me costó procesarlos. Gracias a los que me leen, los que me quieren y los que me apoyan. Pueden escribirme cuando quieran. Mi plan de mañana será ir a Villa la Angostura a disfrutar mi franco.
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"Cuando la montaña llama"
El plan original de domingo era tomar una clase de acroyoga para empezar a sociabilizar con "gente del palo". Qué palo no sé, pero además de realizar una actividad que me gusta me pareció copada la idea de comenzar a hacer sociales por fuera del hostel.
Los planes son buenos como guía, pero puede surgir que algo sea más tentador y eso ocurrió. En el hostel me hice amiga de tres chicas que no eran la superpoderosas pero trajeron azúcar, flores y muchos colores a mi estadía aportando mates y las típicas "charlas de chicas" que a mi soledad le estaban faltando. Así que aproveché mi día franco y la buena compañía para ir hasta el Refugio Frey. Nos tomamos el colectivo 55 en Bustillo que nos llevó a la base del cerro y de ahí caminamos.
Siempre me entusiasmó todo lo relacionado a la vida en la naturaleza, el senderismo y la supervivencia. Quizás esto suena exagerado para quienes practican deportes de montaña habitualmente, pero para mí, que el deporte más extremo que practiqué fue tomarme el Sarmiento en hora pico, es un mundo nuevo. El refugio está en la parte sur del Cerro Catedral y en la puerta te recibe un cartel que dice "1700 m de altura". Al lado está la Laguna Toncek (Eso me lo enseñó internet) donde ahora, que se encuentra congelada podés patinar. El sendero es de aproximadamente 10 km, y tiene una dificultad media, si bien nuestras vidas no corrieron peligro en ningún momento, no sé si es recomendable para alguien que nunca hizo nada de deporte en su vida o que se agite rápido. Son cuatro o cinco horas de caminata, que valen la pena. Es hermoso como el paisaje se va transformando desde un sendero barroso hasta mini cascadas congeladas, piedras que hay que saltar y arboles medio caidos que esquivar. Va desde una tierra semidesnuda a un bosque salido de un cuento. Hasta ahora fue la mejor experiencia que viví. Spuperó mi caminata por los Glaciares allá por el 2008. Llegamos exhaustas, muertas de frío pero felices. Adentro nos esperaba un cartel del Club Andino de Bariloche que nos bienvenía con un "Cuando la montaña nos llama, moviliza nuestro cuerpo y nuestro espíritu. Responder a su llamado es estar dispuesto a percibir la armonía de todos los elementos de la creación en forma humilde, sencilla, divina". Suena como algo trillado esto de "el llamado de la montaña" pero les aseguro que es real y ahí arriba es el único llamado que podés recibir porque afortunadamente no hay señal. Cuando la naturaleza ruge, no es posible ignorarla por mucho tiempo.
Nos quedamos a pasar la noche, ahí con 14 bajo cero abrigándonos. Al subir a las habitaciones nos recibió Emilio, un gato negro que emergió de la oscuridad dandonos un susto digno de un cuento de Edgar Allan Poe. Mucho no nos duró igualmente porque a la media hora, caimos las cuatro rendidas.
13/06
Todo lo que sube, baja.
Otro lunes que me despierto feliz. Otro lunes que no es tan lunes. La rutina mata más que la adrenalina de despertar en la montaña por primera vez en la vida. Me desperté confundida, sin saber si era real pero sí, estaba ahí, viendo una fina nevada que me dió los buenos días. Cuando el equipo completo estuvo listo, nos fuimos abajo a hacernos unos mates para calentarnos. Si bien en el refugio te prestan bolsas de dormir, les recomiendo que lleven la propia porque hace mucho frío.
Después de sacarle fotos a todo y grabar videitos divertidos. Las chicas decidieron patinar sobre la laguna y yo oficié de camarografa oficial. Jugamos un rato con la nieve, nos tomamos unos mates más para devolverle al cuerpo los 37 grados que necesitaba para arrancar y emprendimos el descenso. Ahora con más pilas y ayudadas por la gravedad (Gracias Newton por descubrirla), bajamos a los saltos la mitad del camino. Nos divertimos mucho bajando y hablando de lo linda que fue esta experiencia la cual vale la pena repetir. Fotos acá
14/06
Qué mal la estoy pasando!
Hoy mi día fue tranquilo. Después de trabajar me dediqué a disfrutar del sol y dibujar. Jugué con colores y formas, buscando adentro mío para ver qué salía. Tomé unos matecitos con Mati y Euge, mis papás adoptivos de ElWray que de paso les cuento que tienen nueva página, con quienes nos acompañamos en este nuevo comienzo. Después me fui caminando hasta el centro a dar unas vueltas, y termine en mi amada Berlina, tomandome una cervecita acompañada de Cortázar, que me invitó a traerme "Todos los fuegos son el fuego".
Si, una sola porque en casa, me esperaban dos terribles platos de fideos amasados. Tuve que sacrificar mi esbelta figura y clavarme dos platos sin respirar. Con coca Light.
15/06
Lejos está lo que estoy buscando
Me desperté temprano, y googlée planes por Esquel, San Martín de los Andes y varios más. Dedique la mañana a unos buenos mates y pura logística para mi vida, y la parte de ella que dedico en mi blog. Me llena el alma saber que lo que escribo acá lo está leyendo alguien, que ya no se siente tan solo como yo lo estaba. O al menos eso creía hasta empezar a ver blogs como los que escriben Acróbatas del Camino, Aniko Villalba o leer libros que no te abren la cabeza si no que te la explotan con la idea de que eso que soñas, esa vida que querés, es posible y más fácil de lo que crees. Recibí mensajes cargados de ganas de empreder sus propios caminos y les digo una sola cosa: Haganlo! Qué están esperando? Vivan su vida como quieran que es toda suya. Yo no soy ninguna heroína, ni valiente. Tengo en claro que no inventé nada, no soy la primera y espero no ser la última. Mientras tanto, me hace bien saber que están ahí leyendome y mimándome a la distancia.
16/06
Por las noches la soledad desespera (y por las mañanas también)
Todos los que se fueron lejos, o no tanto como yo, te describen las etapas de la distancia. Los primeroz diez días, es la emosión de la libertad, de hacer lo que querés cuando querés, de salir sin abrigo y que nadie te pida que te lo lleves, de no avisarle a nadie a que hora volvés o a dónde te vas. De que no importe a que hora te levantas o cuando te acostás. De no explicar. Allá en Buenos Aires, dejé a los clientes que me quemaban el cerebro, por buscar la paz. El cemento que calienta en verano, por el sol que te mima allá en el fondo del lago. El subte plagado de gente por una montaña solitaria.
A mil trescientos kilómetros en línea recta de todo lo que me atortmentaba. Pero también, a medida que pasan los días me doy cuenta que son mil trescientos kilómetros de unas tortas fritas con mis abuelos, del arroz con leche de mi abuela, de un maullido de mi gata, de los jueves de taller con los pibes, de unos mates en el espacio verde con Coky, de hacer cosas de Mabel con las Mabeles. Pasada la emosión del "me voy vivir sola" está la distancia real entre lo que querés y los que querés. Que si pasa algo bueno no estoy ahí para festejarlo, y si pasa algo malo no lo voy a llorar con ellos. Pero a la vez hay algo mas fuerte que yo que me pide que me quede, y que no me impide seguir siendo feliz cuando miro al lago diciéndome a mí misma "tanto tiempo lo soñaste y ahora es real". Nobody said it was easy me canta Chris Martin, porque separarme de Buenos Aires no iba a ser fácil. Pero día a día refuerzo mi idea de que este es el camino que elijo y no lo cambio por nada.
17/06
Café la humedad.
Café sin humedad, sola en compañia de un frío que te taladra los huesos, porque em invierno se empezó a a asomar y se hace sentir. "Tendrás un largo y frío invierno si tienes un corto y frío corazón" le dijo Merlín al Caballero de la armadura oxidada lo cual está implícito entre los habitantes de Bariloche, los desterrados, los que huyeron de la ciudad para buscar algo mejor, así es como todos son súmamente hospitalarios con los nuevos habitantes, con el amigo del amigo que en dos semanas se transforma en tu hermano del alma. Porque acá nos unen las soledades y esa necesidad de los amigos de toda la vida que no están físicamente acá. Y así es como estando sola, no me siento sola nunca.
18/06
Sábado a la noche, otra vez
Quizás esta publicación la demoré un poco más, porque hubo muchos sentimientos mezclados en ella. Y me costó procesarlos. Gracias a los que me leen, los que me quieren y los que me apoyan. Pueden escribirme cuando quieran. Mi plan de mañana será ir a Villa la Angostura a disfrutar mi franco.
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